Reflexión sobre la asignatura

Considero, indiscutiblemente, que lo mejor de esta asignatura ha sido el profesor. Ha conseguido hacer del aula un lugar tranquilo, apacible, en el que cualquiera de nosotros se ha sentido con la libertad y la confianza de opinar y aportar sus conocimientos. 

En realidad, me ha parecido la asignatura más trabajosa y dura de las tres que componen la parte genérica de este máster. El hecho de tener que cumplir con 20 entradas en un blog puede resultar bastante pesado, incluso, a veces he optado por incluir cosas que respondiesen a mis gustos y mi forma de ser y, de esta forma, ayudar a mis compañeros a conocerme más a fondo. Además, los contenidos no dan pie a nuestras propias interpretaciones.

Aun así, creo que el profesor ha estado muy a la altura y que, a través de una metodología didáctica, ha conseguido que el alumnado se interese por la asignatura. Considero que es el claro ejemplo del profesor "cercano" que, en muchas ocasiones, brilla por su ausencia. En mi caso, pocos son los profesores que recuerdo cercanos al alumno e interesados por su contexto y desarrollo académico. Gran parte de ellos únicamente impartían sus contenidos para poder calificar aquello que nos habían enseñado, todo a través de la evaluación. 

En un futuro me gustaría ser una profesora parecida a ti, cercana. Me gustaría que mis alumnos vieran en mí un apoyo y no una imposición; una líder a la que hacer caso, en la que confiar y por la que sentirse comprendidos. Sé que, inevitablemente, tendré que guardar las distancias con ellos y que no podré involucrarme tanto como me gustaría en el proceso de aprendizaje y el contexto del que provienen. No obstante, espero hacerlo lo mejor posible y que guarden un bonito recuerdo de mí como yo lo hago de tí. ¡Gracias!